Nos gusta probar técnicas diferentes en nuestro taller de plástica. Lo importante es utilizar soportes, materiales y técnicas distintas para fomentar la creatividad. Y os puedo asegurar que en clase hay mucho talento.
Es posible que cada persona nazca con una especial facilidad para algo determinado: la música, la pintura, el deporte, las matemáticas, las relaciones sociales, etc. De lo que sí estoy segura es que a esta edad tenemos que poner al alcance de los pequeños una gran variedad de experiencias para que poco a poco vayan definiendo sus gustos, preferencias, en definitiva, sus talentos.
El esgrafiado es una técnica antigua que se basa en hacer incisiones sobre la capa superior de un soporte para descubrir la capa inferior. Esta actividad es un clásico en las clases de plástica ya que les sorprenden los resultados; como son pequeños, es casi imposible explicarles la técnica a priori. No saben porqué tienen que tapar de negro un papel previamente pintado con colores claros.
Normalmente utilizamos ceras semiduras de colores variados para la capa inferior y cera negra blanda (tipo Manley o Dacs) para la superior.
Hasta que empiezan a raspar con un palillo y descubrir los colores…
Pero la creatividad normalmente tiene una consecuencia, je, je. Nada que no se quite con agua y jabón.
Se ensucian pero … se divierten JA JA
Gracias.
Aquí en clase hacen cosas que normalmente en casa no pueden. Esta actividad es bastante sucia pero los resultados son muy bonitos. Un saludo.
Les han quedado genial, María. Y se ve que ellos han disfrutado un montón. Un abrazo y muy buena semana.
De eso se trata. Aunque al final de la clase parecían mineros, je, je.
Buena semana.
Que bien se lo pasan y lo mucho que estan aprendiendo.gracias.
Unos salen más manchados que otros; la mayoría de las veces es cuestión de carácter. El tuyo es de los que más disfruta metiendo las manos en la masa. Y aprende, de eso estoy segura.