No está mal para ser la primera semana después de las vacaciones. Estas fiestas son una buena forma de comenzar el trimestre sin estres y poco a poco.
Álvaro (el grande, como dicen ellos) ya cumplió los años durante los primeros días de Semana Santa y como no hubo clase no pudimos festejarlo.
El martes nos contó que su fiesta la celebró en Chipiona, pero sin niños, así que hoy ha soplado la vela del número 4 con mucha ilusión y rodeado de sus compañeros y compañeras.
Ha sido un día fantástico, aunque se nos ha olvidado los tirones de orejas.
Mañana, mañana…
Muchísimas felicidades para Álvaro. Un abrazo y muy buena semana.
De tu parte, Ana.