A nosotros nos gusta celebrar los días especiales y este mes de marzo tiene muchos. Algunos de ellos son especialmente pedagógicos y podemos aprovecharlos para hacer actividades interesantes. Y este es el caso del día 21, Día Mundial de la Poesía.
La semana pasada se me ocurrió la idea de organizar parejas entre niños y niñas para que entre ellos se regalasen un poema. Ellos mismos eligieron su pareja, aunque hubo alguna que otra desavenencia que supieron solventar amistosamente.
En casa y con la ayuda de las familias cada uno preparó su poesía, unos inventada y otros seleccionada de un autor. Lo importante es participar y ofrecer con cariño unas palabras rimadas.
Y así fue. Emociona ver los abrazos y besos que se dieron al regalar sus poesías:
Y por supuesto, la mayoría de ellos la han leído.
