Durante toda esta semana hemos estado en clase bajo mínimos. Han faltado hasta 10 niños y niñas a causa de los virus de esta época.
A pesar de todo, hemos continuado con un ritmo casi normal pero con menos bullicio y más tranquilidad. ¡Diez alumnos menos se notan mucho! Deseamos que se recuperen prontito y vuelvan lo antes posible al cole.
En clase hemos tenido durante toda la semana un taller de lavandería para que experimentasen “un poquito” el trabajo que realizaban las lavanderas antiguamente. Nos han faltado los utensilios antiguos, excepto el jabón casero que lo trajo Rocío, ya que las familias no tenían ninguno a mano para poder traerlo al cole. A ver si el curso que viene tenemos más suerte y podemos tenerlos.
De todas formas hemos recurrido al señor google (o será señora, ji, ji) y hemos visto lo que hicieron mis antiguos alumnos/as del curso pasado por estas fechas; así se han hecho una idea más clara de en qué consistía esta peculiar fiesta. Si la quieres ver, haz clic en la imagen.
En clase se han comido un trocito de coquillo, como hacían las lavanderas el día de la quema del Febrero o pelele. Los han preparado algunas abuelas del cole.
Nos ha gustado visitar nuestro pelele que como un año más han realizado las mamis y papis del AMPA de este cole.
Hoy lo hemos pasado muy bien; los peques se han portado genial y he tenido una gran ayuda con los papis y mamis que nos han acompañado.
Al llegar a la Plaza Mayor nos hemos encontrado las escaleras mojadas, pero gracias a la rápida colaboración de las familias hemos puesto plásticos y cartones sobre los peldaños y hemos tenido unas vistas inmejorables y lejos del peligro del fuego (es mejor no estar tan cerca, por si las moscas).
Mirad qué bien se lo han pasado y qué caras de expectación y asombro tenían.
Al volver a clase hemos jugado un ratito en los rincones y todos hemos participado en la lavandería de clase.
