Las rethailas de echar a suertes me encantan; esas pequeñas poesías con musicalidad y ritmo peculiar me han servido a lo largo de estos tres años para muchas cosas: para decidir a qué niño o niña le toca quedársela en un juego, para decidir el orden de una fila, incluso los niños han aprendido a usarlas en caso de tener una pequeña discusión y no ponerse de acuerdo, pero sin duda han sido imprescindibles en el taller de juegos populares; esta es mi selección de las que he utilizado: